Competencia de apps de movilidad colaborativa empujó a 145 taxistas a devolver placas

La irrupción de las plataformas de movilidad colaborativa como Uber y DiDi ha hecho que el servicio de taxis se enfrente a la disyuntiva de modernizarse o desaparecer.

En lo que va de año, 145 dueños de placas devolvieron la concesión, mientras que el Consejo de Transporte Público (CTP) acumula 2.300 permisos disponibles para cualquier persona interesada.

Se trata de un 20% de las concesiones que hay en el país, según Manuel Vega, director ejecutivo del CTP, quien agregó que no es posible ofertarlas con éxito.

“Es una situación verdaderamente atípica porque la gente no quiere una de las placas que están disponibles, mientras que al mismo tiempo cada semana tenemos que conocer en la junta directiva del CTP unas tres o cuatro devoluciones”, agregó Vega.

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La entrega del permiso no tiene ningún costo para los taxistas, sin importar si la explotación del mismo fue por uno o 20 años.

“El taxista está acorralado, necesitamos que los legisladores aprueben una ley que nos permita competir”, dijo Gilberth Ureña, representante del gremio.

La situación que reporta el CTP se debe a la competencia de las aplicaciones como Uber, DiDi y Beego que conectan a los socios conductores con los pasajeros a través de Internet, ofreciendo, además, un servicio más barato y con opciones para registrar el destino y la ruta que realiza el conductor.

En el país las más grandes -y concentrados básicamente en la GAM - son Uber con 22 mil choferes y DiDi, con 5 mil conductores, mientras que los taxis son 11 mil.

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“Es cuestión de tiempo para que se normalice la situación, porque en todos los otros países que operamos hemos podido convivir con otros métodos de transporte sin mayores consecuencias. Uber está regulado en más de 132 ciudades y en todas está comprobado que ha podido convivir con otros medios de movilidad”, dijo Carolina Coto, gerente de Comunicaciones de Uber Centroamérica.

Si el Gobierno de Carlos Alvarado asume “con liderazgo” el tema de las plataformas de movilidad colaborativa, a finales de enero se estaría dictaminado el proyecto que legalizaría a las apps, según Roberto Thompson, presidente de la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso.

Sin embargo, el avance o retraso del proyecto dependerá en última instancia del presidente, ya que a partir de diciembre, el Congreso iniciará las sesiones extraordinarias, las cuales se extenderán hasta abril y son el período legislativo que se caracteriza por darle al mandatario la oportunidad de definir la agenda de debate de la Asamblea Legislativa.

La semana pasada, el mandatario no convocó el proyecto a la corriente legislativa.

“Ni este Gobierno ni el anterior han tomado con seriedad este tema; por el contrario, han estado de alguna manera dubitativos, lo que ha incrementado la situación de incertidumbre con respecto al transporte público modalidad taxi”, dijo Thompson.