¡Auxilio!, ¿qué hago con mi aguinaldo?… ¿qué es lo mejor para mí?

Es de las preguntas más frecuentes que nos hacen cientos de nuestros graduados del Taller Caja de Herramientas, donde compartimos todas las herramientas que nos llevaron a lograr nuestra libertad financiera.
Interrogante importante porque la mayoría de las personas lo gastará en regalos, vacaciones de fin de año, marchamos y otros gastos anuales. Otros, tomarán un compromiso consigo mismos por varias décadas, unos por el total de su vida laboral, para hacer realidad su sueño de jubilarse ricos y no depender de sus hijos o el Estado en un futuro.
Hoy invitamos a Carolina Cautelosa y su amiga Andrea Apurada con las que usted tal vez se identifique. Ambas reciben un salario mensual neto de ¢400 mil. Para el ejercicio, la inflación anual y aumento salarial es igual, para eliminar pérdida de poder adquisitivo.
La Sra. Apurada hace una lista mental de cosas en las que gastará su aguinaldo: regalos, vacaciones y otros. Lo hace todos los años desde que trabaja.
La Sra. Cautelosa escribe una lista de inversiones en las que diversificará su aguinaldo, las estudia para encontrar la mezcla que le dé rentabilidad idónea. Los gastos adicionales de fin de año, claramente anotados en su agenda, los cubre con un ahorro automático que tiene desde enero por ¢18 mil quincenales que le generan un segundo aguinaldo. Hábito que tiene desde que tomó el Taller Caja de Herramientas.
Durante los próximos 30 años, sumando sus aguinaldos de ¢400 mil anuales, Andrea gastará ¢12 millones.
Carolina invertirá esa misma cantidad 9% de interés neto anual y se creará un capital cercano a ¢60 millones, así logrará su libertad financiera. Su dinero trabaja para ella generándole los ¢400 mil mensuales en intereses, que igualan el salario que recibía mientras trabajaba y los ¢400 mil anuales que igualan su aguinaldo, que continúa invirtiendo para su jubilación.
Ambas son jóvenes y su vida laboral será de 40 años en los que la Sra. Apurada gastará ¢16 millones en total y la Sra. Cautelosa amasará una fortuna cerca de ¢150 millones que al mismo 9% le genera al mes 2,5 veces su salario, más de ¢1 millón anual que continúa invirtiendo para su descendencia.

Maria Laura Víquez Pacheco
Experta en finanzas personales
Co-Fundadora LIBER Financultura