Contraloría llama la atención por baja ejecución presupuestaria

La baja ejecución en los presupuestos presentados por las instituciones del Estado pone en alerta a la Contraloría General de la República, pues tiene un impacto en el desarrollo económico y social del país, además de que refleja una mayor ineficiencia.
Por ejemplo, la baja ejecución del Ministerio de Obras Públicas y los consejos adscritos a esta entidad, como el Conavi, impacta en el desarrollo de infraestructura, donde Costa Rica se encuentra en los últimos lugares en competitividad, señaló la Contraloría en un informe dado a conocer ayer.
Un caso similar se presentó en el IMAS, que subejecutó programas sociales como la Red de Cuido Infantil y Avancemos, lo que incrementó el excedente de la institución en un 57%. El Banhvi, otra entidad de bien social, también presentó un crecimiento de su superávit.
Por su parte, la Caja de Seguro Social utilizará parte de los recursos no utilizados para proyectos relacionados con la Ley General de Control de Tabaco, Red Oncológica y Proyectos especiales para adquirir títulos valores a largo plazo, debido a que no hay proyectos para ejecutar este año.
En el caso de Acueductos y Alcantarillados, se observa una disminución significativa de la asignación presupuestaria para inversiones, mientras que parte de los recursos del superávit se utilizarán para el pago de salarios y “servicios especiales”, añadió la Contraloría.
En el caso de Recope, además de la menor ejecución, llamó la atención porque hasta la fecha no se han dado acciones concretas sobre el futuro de la refinería conjunta con el Gobierno de China.
En general, el Gobierno central y las instituciones destinarán para 2016 la cifra de ¢5,7 billones en el pago de remuneraciones, una cuarta parte del presupuesto y casi dos puntos porcentuales más que el año pasado.
Mientras tanto, de cada ¢100 de los presupuestos, solo ¢5 se destinan a proyectos de inversión y compra de activos.